EL ESCÁNDALO EN LA COOPERATIVA DE GRAND BOURG: UN ROBO DESCARADO A LOS SOCIOS
En un hecho que solo puede calificarse como un atropello a la confianza de los socios, la presidencia de la Cooperativa Telefónica de Grand Bourg, encabezada por Jorge Lago, se encuentra en el centro de una tormenta de indignación tras los resultados del ejercicio 2022-2023. Los números no solo son alarmantes; son un grito desesperado de corrupción y desfalco.
Según los informes financieros oficiales, la Cooperativa recaudó la abultada suma de $1.807.514.709,36 durante el período en cuestión. Sin embargo, lo que podría haber sido un motivo de orgullo y prosperidad para la institución terminó en una pérdida de $1.794.589,06. Este único dato despierta las peores sospechas, pero más que eso, confirma la hipótesis de un “dibujo contable” cuidadosamente elaborado para enmascarar lo que parece ser un robo descarado a los socios.
La magnitud de la aberración
¿Cómo es posible que una entidad que maneja semejante volumen de dinero cierre el ejercicio en rojo? La respuesta no está en la ineficiencia, sino en la desvergüenza. Este balance deja al descubierto lo que podría tratarse de un entramado de desfalcos, manejos turbios y beneficios personales obtenidos a costa del esfuerzo colectivo de los socios.
No hay excusa válida que pueda justificar semejante derroche. Lo que hay aquí es una presidencia que parece haber olvidado su función de servir y representar los intereses de la comunidad. La cifra de pérdida no es solo un número; es el retrato de una gestión que ha traicionado a quienes depositaron su confianza en ella.
Un grito de justicia
No se trata de sospechas vagas ni de rumores infundados. Los números son claros, y la indignación de los socios está completamente justificada. Es imperativo que se realice una auditoría externa inmediata, una investigación judicial exhaustiva y que se lleve ante la justicia a todos los responsables de este atropello.
Este escándalo no solo daña el presente de la Cooperativa, sino que también compromete su futuro. Los socios no pueden ni deben quedarse de brazos cruzados mientras su esfuerzo y patrimonio son saqueados sin pudor. El llamado al cambio
Ante esta situación, se vuelve más urgente que nunca renovar la conducción de la Cooperativa. Hace falta un liderazgo que sea transparente, honesto y comprometido con los intereses de la comunidad. La continuación de Jorge Lago en la presidencia es insostenible, y su gestión debe ser recordada como un ejemplo de lo que nunca más debe ocurrir.
Los socios tienen en sus manos la posibilidad de cambiar el rumbo de la Cooperativa. Es el momento de exigir respuestas claras, acciones concretas y, sobre todo, justicia. Porque lo que está en juego no es solo el dinero; es la dignidad y la confianza de toda una comunidad.
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